• 12/11/2014

    5° Encontro latino-americano pela defesa dos territórios articula frente contra extrativismo

    Comunidades campesinas, indígenas e organizações do Peru, México, Brasil, Guatemala e Honduras se reuniram no 5° Encontro Latino-americano de Cuidado e Defesa do Território Frente a Complexidade dos Minerais na América Latina.

    O encontro fortaleceu a construção de uma frente de articulação das organizações a fim de construir alternativas de resistência e compartilhar experiências de luta contra o modelo corporativo extrativista mundial, que invade territórios e povos com o propósito de exterminá-los.

     

    Confira na íntegra o documento, em espanhol, do encontro:

     

    Declaración  V Taller  Latinoamericano Cuidado y Defensa del Territorio Frente a la Complejidad  de las Mineras en América Latina

     

    Puebla, 7 de noviembre de 2014

     

    Los pueblos, comunidades campesinas e indígenas, y organizaciones de Chile, Perú,  Colombia, Guatemala, Honduras, México, Argentina y Brasil reunidos en el “V TALLER   LATINOAMERICANO CUIDADO Y DEFENSA DEL TERRITORIO FRENTE A LA COMPLEJIDAD  DE LAS MINERAS EN AMÉRICA LATINA” , hemos logrado reconocernos en el compartir de  nuestras experiencias de lucha, disidencia, resistencia y construcción de alternativas  desde una visión colectiva y esperanzadora para la configuración de otro mundo posible, que enfrente radicalmente las imposiciones de un sistema hegemónico que nos arrastra a  la destrucción de la vida. Sabemos que enfrentamos un adversario común cada vez más poderoso, perverso y violento, que intenta, desde diversas estrategias, seguir imponiendo  su modelo extractivo corporativo mundial, que se extiende invadiendo nuestros territorios y pueblos con el propósito de exterminarlos. Esta comprensión nos exige ampliar el carácter de nuestra acción comunitaria, y nos compromete a una mayor y mejor articulación que trascienda y mundialice nuestras luchas locales.

    El análisis del contexto regional y de la coyuntura actual nos encaminó a reflexionar sobre las causas estructurales y las consecuencias de los conflictos socio-ambientales que impone el extractivismo en Nuestra América, configurando la amenaza y re-colonización de nuestros territorios, el cual requiere de la sistemática violación y vulneración de las  soberanías de los pueblos, bajo la tutela del sistema capitalista globalizante. Estas  reflexiones también nos llevaron a reconocer y compartir la indignación sobre las  consecuencias que este modelo de muerte implica en las múltiples dimensiones de  nuestra vida, y que se hacen manifiestas en las experiencias de despojo, daños  irreversibles a la naturaleza, la destrucción de los procesos identitarios y, en  consecuencia, la desaparición de nuestras culturas. Ante esta situación, que no quede  duda que tan fuerte como nuestra indignación, lo es también nuestro espíritu milenario de  resistencia, reación y fecundación de un mundo basado en el respeto, el cuidado entre nosotras y nosotros, en el legado de honrar a nuestra madre tierra y la espiritualidad que  refuerzan nuestra cosmovisión para con el agua, fuego, tierra y viento.

    Reafirmamos nuestra convicción de seguir con obstinada rebeldía, de continuar     contestatarios, contestatarias y disidentes ante quienes secuestran nuestros bienes naturales, nuestra pluriculturalidad, los derechos, la biodiversidad y la vida misma. De  este encuentro salimos fortalecidos para crecer y trascender en nuestros procesos de articulación, en la construcción de alternativas relacionadas con el impulso de procesos  de transformación dialógicos que nos permitan cada vez más el fortalecimiento de la  comunalidad con abuelas y abuelos, hombres y mujeres, las y los jóvenes, niñas y niños  organizados y en movimiento. Asumimos la responsabilidad que, desde nuestro pasado y sabiduría heredada por nuestros abuelos y abuelas, pelearemos por nuestro presente y  nuestro futuro, sin dejarnos arrinconar por los miedos, convencidos de que lograremos           romper con la reproducción y el avance de este sistema hegemonizante.

    Este proceso, que hoy hacemos público, se desarrolla en el marco de la gravísima     situación que se vive en México, en el contexto de la desaparición forzada de 43 jóvenes de la Normal Rural de Ayotzinapa en Guerrero, situación que evidencia el marco de  impunidad, de corrupción, falta de procuración de justicia y prevalencia del crimen organizado, que reconocemos como parte connatural del capitalismo.

    Hacemos un llamado a los pueblos, comunidades campesinas e indígenas y  organizaciones del mundo, a que, con osadía y tenacidad, transformemos nuestra     realidad, defendamos la vida en cualquiera de sus manifestaciones, a que refrendemos la  solidaridad y articulación de nuestras luchas y a partir de la defensa del territorio,  renovemos nuestro compromiso con las justas luchas basadas en la autodeterminación,  auto-organización y autoreconocimiento para el BUEN VIVIR.

         Celebramos esta posibilidad de encuentro y aprendizaje como espacio de integración de  nuestras apuestas y luchas, como posibilidad real de avanzar en la materialización de   nuestros sueños, esperanzas y utopías en la soberanía de todos los pueblos.

               

                ¡VIVOS SE LOS LLEVARON, VIVOS LOS QUEREMOS!            

                ¡TERRITORIOS LIBRES, PROHIBIDOS PARA LA MINERIA¡            

                ¡MUNDIALICEMOS NUESTRA LUCHA¡            

                ¡MUNDIALICEMOS LA ESPERANZA¡

                 

                Colectivo Sumaj Kawsay  (Argentina)

                Rede Justiça Nos Trilhos (Brasil)       

                Cimi Maranhão (Brasil)

                Associação Comunitária do Povo Gavião (Brasil)

                Comisión Intereclesial de Justicia y Paz (Colombia)

                Censat Agua Viva-Amigos de la Tierra Colombia

                Resguardo Humanitario Ambiental (Colombia) (SO BIA DRUA)              

                Comunidades Construyendo Paz en los Territorios (CONPAZ) (Colombia)           

                Proyecto de Desarrollo Santiago Prodessa (Guatemala)

                Consejo de Pueblos de Occidente (Guatemala)

                Misioneros Claretianos (Honduras)  

                Organización Madre Tierra (Honduras)

                 Comité Regional Ambientalista del Valle de Siria de Honduras (Honduras)       

                Colegio de San Luis AC Centro Público del Conacyt (México)

                Asamblea Veracruzana de Iniciativas y Defensa Ambiental (LAVIDA) (México)

                Procesos Integrales para la Gestión de los Pueblos PIAP (México)

                Centro Regional de Derechos Humanos Bartolomé Carrasco Briseño (México)

                BIOS Iguana, A.C.

                 Consejo Indígena por la Defensa del Territorio de Zacualpan (México)

                Proyecto de Fe Compartida en Tarahumara PROFECTAR (México)

                 Centro de Capacitación y Defensa de los Derechos Humanos

                 e Indígenas CECADDHI (México)

                Otros Mundos, A.C. Chiapas (México)

                Red Solidaria DH (México)

                Tequio Jurídico A.C. (México)

                Iyolosiwa A.C.  (México)

                Educa, Servicios para una educación alternativa, A.C.

                Educa, Servicios para una educación alternativa, A.C.  (México)

                Instituto Mexicano para el Desarrollo Comunitario (IMDEC)  

                Educa, Servicios para una educación alternativa, A.C.  (México)

               Instituto Mexicano para el Desarrollo Comunitario (IMDEC)  (México)

               Instituto Mexicano para el Desarrollo Comunitario (IMDEC)  (México)

              Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Juárez (Centro Prodh) (México)

              Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Juárez (Centro Prodh)  (México)

              Centro de Educación Popular e Investigación Social-Proyecto Amigo

                (Perú)

              Grupo de Formación e Intervención para el Desarrollo Sostenible GRUFIDES (Perú)

              Red Latinoamericana y Caribeña de Educación Popular de las Religiosas del Sagrado

                Corazón (LA RED)

              Consejo de Educación Popular de América Latina y El Caribe (CEAAL)

               

     

     

               

     

     

     

     

     

     

                 

               

               

                 

                 

                 

     

                 

     

               

                 

                 

               

               

               

               

                 

                 

               

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  • 11/11/2014

    Comunidades manifestam repúdio à PL sobre uso de conhecimentos tradicionais e recursos genéticos

     Na tarde desta terça-feira (11) ocorre na Câmara dos Deputados, no plenário Ulysses Guimarães, uma Comissão Geral sobre o Projeto de Lei (PL) 7735/2014, que trata do acesso e uso dos conhecimentos tradicionais e recursos genéticos e que foi encaminhado sob regime de urgência pelo Poder Executivo ao Congresso.

    Representantes das indústrias farmacêuticas e do Ministério do Desenvolvimento, Indústria e Comércio Exterior admitiram, durante a Comissão Geral, que o governo está debatendo o teor do PL 7735 a três anos com o setor industrial. No entanto, povos e comunidades tradicionais foram excluídos intencionalmente do processo. Não houve qualquer tipo de discussão ou consulta aos povos indígenas, comunidades tradicionais e camponeses.

    Uma carta assinada por 54 organizações, entre elas o Conselho Indigenista Missionário (Cimi), manifesta repúdio ao Projeto de Lei e a forma como o mesmo tem tramitado.

    Leia o documento na íntegra:

     

     

    De onde brotam os espinhos

     Brasília, 11 de novembro de 2.014.

    Os Povos e Comunidades Tradicionais e Agricultores Familiares do Brasil, em nome próprio, representados por suas entidades e entidades parceiras que subscrevem a presente, com base nos artigos 8 ‘j’, 10 ‘c’ da Convenção da Diversidade Biológica, promulgado pelo Brasil no Decreto nº. 2.519/1998, a Convenção 169 da OIT, promulgada no Decreto nº 5.051/ 2004, especialmente em seus artigos, 5, 6 e 7, no Tratado Internacional sobre Recursos Fitogenéticos para Alimentação e Agricultura, promulgado no Decreto nº 6.476/2008, especialmente em seu artigo 9, na Constituição Federal, especialmente nos artigos 215, 216 e 225, no Decreto 6.040/2007, Lei 10.711/2003, Lei 11.326/2006, e Decreto 7.794/2012, vêm a público manifestar repúdio ao Projeto de Lei que tramita na Câmara Federal sob o nº 7.735/2014, encaminhado em regime de urgência pelo Poder Executivo, sob pressão do Ministério do Meio Ambiente, Ministérios da Ciência, Tecnologia e Inovação e do Ministério do Desenvolvimento, Indústria e Comércio, e denunciar os poderes Legislativo e Executivo Nacionais pela violação aos Direitos dos Agricultores Familiares, Povos e Comunidades Tradicionais, diante dos motivos que passa a expor:

    – O Projeto de Lei representa uma nova tentativa de regulamentar o tema do Acesso e Repartição Justa e Equitativa de Benefícios, hoje regido pela MP 2.186-16/2001, que evidencia motivo de preocupação nacional e internacional, especialmente no Brasil, por sua megadiversidade e por ser, historicamente, território de inúmeras formas de expropriação de conhecimentos tradicionais e de recursos naturais.

    – A preocupação para com os direitos dos Povos e Comunidades Tradicionais e de agricultores familiares (considerados como guardiões da biodiversidade e detentores dos conhecimentos tradicionais a ela associados) surge apenas no aspecto econômico e em especial no trato da repartição de benefícios, não considerando o papel fundamental de povos e comunidades tradicionais para o uso sustentável e a conservação da biodiversidade brasileira, os quais constituem os outros objetivos da Convenção da Diversidade Biológica.

    – A não observância ao processo de debate internacional quanto à implementação do Protocolo de Nagoya sobre Acesso aos Recursos Genéticos e Repartição de Benefícios, ainda não ratificado pelo Congresso Nacional.

    – A incorporação da temática de agricultura e alimentação, quando a referência é o Tratado Internacional sobre os Recursos Fitogenéticos para a Alimentação e Agricultura/FAO, que também abrange o uso sustentável e a conservação desses recursos, os direitos dos agricultores ao livre uso de suas sementes.

    – A ausência de um processo de consulta ampla e da participação formal de organizações representativas de Agricultores, Povos e Comunidades Tradicionais, sem que suas preocupações e contribuições fossem reconhecidas ou incorporadas, desrespeitando o exercício do direito de participação e de resguardo de seus interesses.

    – Pela invisibilidade dos sujeitos de direito que representam a força produtiva, a proteção da biodiversidade e da agrobiodiversidade nacional e que detém conhecimentos que são objeto de expropriação territorial e exploração econômica, que foram solenemente ignorados representando de um lado a relação desigual de poderes e de outro o descompromisso do Brasil com a própria legislação nacional quando conflitante com interesses eminentemente econômicos.

    – O assédio praticado pela comunidade acadêmica (que se omite em discutir os direitos dos povos e comunidades tradicionais neste processo, e pauta a discussão unicamente para garantir a facilitação do acesso aos recursos genéticos e aos conhecimentos tradicionais associados, atuando na perspectiva da captura do conhecimento sem a divulgação dos resultados) e pela indústria, interessada no desenvolvimento tecnológico a qualquer preço e em altos rendimentos.

    – A exclusão do exercício do direito a negar o acesso aos recursos genéticos e aos conhecimentos tradicionais associados, quando o seu próprio é sistematicamente dificultado.

    – A participação de organizações que surgem como se representantes dos interesses dos povos e comunidades tradicionais, mas que estão interessadas no lucro líquido obtido a partir da comercialização de produtos originários do acesso a recurso genético ou conhecimento tradicional associado.

    – Sem um processo de consulta e participação efetiva dos sujeitos de direito, tem-se uma proposta de legalização unilateral da exploração dos recursos e dos conhecimentos tradicionais associados, estando estes, relegados a um “obstáculo” a ser superado mediante pagamento ou promessa de pagamento.

    Pelos motivos destacados, não é possível aos Agricultores familiares e aos Povos e Comunidades Tradicionais, referendar ou participar de forma limitada e excludente das discussões deste Projeto de Lei que, a pretexto de regulamentar e impe acaba por cercear direitos conquistados a base de luta social.

    O Projeto de Lei, tal como apresentado, é o reconhecimento da falência do Estado Brasileiro no combate à biopirataria e na garantia de direitos coletivos, que subserviente a sistemas corporativos industriais e financeiros, desconsidera o papel de povos e comunidades tradicionais, únicos sujeitos que efetivamente desenvolvem estratégias para o uso sustentável e a conservação da diversidade biológica brasileira.

    Esta denúncia vem reforçar as denúncias constantes da carta ‘De Onde Brotam as Sementes’ com as recomendações da sociedade civil ao governo brasileiro, bem como a Carta elaborada pela AS-PTA que marca o posicionamento dos agricultores familiares brasileiros.

     

    Assinam a presente carta:

    ASA Brasil

    ASA Paraíba

    AS-PTA Agricultura Familiar e Agroecologia

    Articulação dos Povos Indígenas da Região Sul – ARPIN-Sul

    Associação Brasileira de Agricultura Biodinâmica

    Associação de Agricultura Biodinâmica do Sul

    Articulação Pacari de Plantas Medicinais do Cerrado

    Articulação Puxirão dos Povos Faxinalenses

    AS-PTA – Agricultura Familiar e Agroecologia

    Associação Gaúcha de Proteção ao Ambiente Natural – Agapan

    Associação das Mulheres Organizadas do Vale do Jequitinhonha

    Associação dos Agricultores Guardiões da Agrobiodiversidade de Tenente Portela – AGABIO

    Associação Nacional da Agricultura Camponesa

    Associação Nacional de Agroecologia – ANA

    Associação para o Desenvolvimento da Agroecologia – AOPA

    Antonio Andrioli – UFFS

    Bionatur

    Campanha Permanente contra os Agrotóxicos e Pela Vida

    Centro de Agricultura Alternativa do Norte de Minas – CAA/NM

    Centro de Apoio a Projetos de Ação Comunitária – CEAPAC

    Centro Ecológico

    Confederação Nacional dos Trabalhadores na Agricultura – CONTAG

    Cooperativa Coppabacs – AL

    Conselho Indigenista Missionário – CIMI

    FASE – Solidariedade e Educação

    Federação dos Trabalhadores na Agricultura Familiar do Brasil – FETRAF

    Fórum Mudanças Climáticas e Justiça Social

    Fórum Nacional de Combate aos Impactos dos Agrotóxicos

    Fundação Mokiti Okada

    Instituto Terra Viva do Brasil de Agroecologia

    Leonardo Melgarejo – ABA

    Marcha Mundial de Mulheres – MMM

    Marciano Toledo da Silva – MPA Brasil

    Marijane Lisboa – USP

    Morada da Floresta;

    Movimento das Aprendizes da Sabedoria (Benzedores e Benzedeiras, Parteiras, e Costureiras de Rendidura)

    Movimento das Mulheres Camponesas – MMC

    Movimento dos Atingidos por Barragens – MAB

    Movimento dos Pequenos Agricultores – MPA

    Movimento Urbano de Agroecologia – MUDA

    Movimentos Sem Terra – MST

    Núcleo Amigos da Terra Brasil

    PACS – Instituto Políticas Alternativas para o Cone Sul

    Paulo Kageyama – USP

    Rede Brota Cerrado de Cultura e Agroecologia

    Rede de Sementes Livres Brasil

    Rede Eco Vida de Agroecologia

    Rubens Onofre Nodari – UFSC

    Suzi Barletto Cavalli– UFSC

    Terra de Direitos

    Via Campesina Brasil

    Via Campesina Sudamerica

    Dep. Marcon-PT/RS

    Rede de Agrobiodiversidade do Semiárido Mineiro

    Rede Puxirão de Povos e Comunidades Tradicionais

     

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  • 11/11/2014

    Professor Kaingang é covardemente assassinado em Vicente Dutra (RS)

    Com pesar e indignação comunicamos o assassinato do professor Kaingang Davi Limeira de Oliveira de 22 anos, da Terra Indígena, Rio dos Índios, no município de Vicente Dutra (RS). O município está localizado numa região, onde ocorrem há décadas, sérios conflitos contra os indígenas em função da luta da comunidade Kaingang pela demarcação e garantia das terras.

     

    Os Kaingang vivem em acampamento há décadas e aguardam que a terra seja demarcada e regularizada pelo governo federal.

     

    Segundo informações repassadas por lideranças indígenas, o professor Davi participava de um evento festivo no município de Vicente Dutra na noite de sexta-feira, 07, de novembro. Por volta de 1h da manhã ocorreu uma pequena confusão entre alguns participantes. Davi foi envolvido e acabou sendo esfaqueado pelas costas. Teve os pulmões perfurados e veio a falecer quase que instantaneamente.

     

    O Cimi Sul espera que efetivamente o assassino seja punido. Imaginemos, neste contexto, se fosse o contrário: se um indígena tivesse esfaqueado pelas costas um branco de Vicente Dutra. A repercussão do fato seria absurdamente grande e criminalizariam todos os povos e comunidades indígenas do estado.

     

    Este fato não pode ser caracterizado como caso isolado. Há na região uma forte campanha contra os indígenas, especialmente no norte do Rio Grande do Sul, por conta da luta dos povos pela demarcação de suas terras. Não podemos esquecer que foi naquela região que os deputados federais Luiz Carlos Heinze (PP/RS) e Alceu Moreira (PMDB/RS) conclamaram toda a população a se manifestar contra os indígenas. Foi lá que eles incitaram a violência e chegaram a sugerir que as pessoas se armassem para enfrentar os indígenas e afirmaram que “indígenas, quilombolas, gays e lésbicas são tudo o que não prestam”. Foi em Vicente Dutra também que no final do ano de 2013, os comerciantes do município se negaram a vender alimentos paras os indígenas.

     

    Não podemos deixar de fazer referência a outros casos de violação à vida nos primeiros dias do mês de novembro e uma semana depois do resultado das eleições presidenciais: a jovem Marinalva Guarani-Kaiowá de 27 anos foi encontrada morta às margens da BR-163, próximo ao município de Dourados. Ela foi atingida por 35 golpes de faca; também no Mato Grosso do Sul, no dia 9 de novembro, o jovem Kaiowá,  Adriano Lunes Benites, de 21 anos, foi baleado na perna durante um ataque de pistoleiros contra indígenas da comunidade de Pyelito Kue, localizada na região de Iguatemi.

     

    Assusta constatar que em nosso país seja permitido a segmentos da economia e da política – contrários aos direitos constitucionais dos povos indígenas e quilombolas – agirem impunemente quando promovem o preconceito e as mais variadas formas de violações ao direito à vida. Até quando as autoridades públicas de nosso Brasil continuarão governando, legislando e julgando tendo como horizonte a defesa destes segmentos, que deveriam ser caracterizados como criminosos?

     

    Nossa solidariedade e apoio aos familiares do professor Davi que foi covardemente assassinado e ao povo Kaingang que luta pela defesa de seus direitos.

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  • 10/11/2014

    Indígenas e quilombolas firmam aliança para a demarcação de terras no sertão de PE

    Se outrora indígenas e quilombolas do Nordeste resistiram juntos à escravidão, em guerras de libertação, caso da Cabanada, no século XIX, e na articulação entre aldeias e quilombos na luta pela terra, baseada em dinâmicas interculturais, hoje não é diferente para o povo Pankará e comunidades quilombolas localizadas no município de Itacuruba, sertão de Pernambuco.

    Neste final de semana ocorreu o 1º Encontro de Comunidades Tradicionais de Itacuruba, envolvendo indígenas e quilombolas. Acossados pelas intervenções desastrosas do Estado brasileiro, seja pela remoção de famílias para a construção da Barragem de Itaparica, que desalojou toda a cidade de Itacuruba, obrigando sua refundação noutro canto de caatinga, seja pelo impacto no rio São Francisco, que já não dá mais peixes como antes, ou pela não demarcação das terras, as comunidades decidiram lutar e resistir juntas, contrariando a postura de Incra e Funai ao alimentar brigas entre os grupos.

    As três principais pautas são: luta pela reforma agrária, demarcação das terras tradicionais, além da posição veemente contra grandes empreendimentos que possam afetar as comunidades da região – os traumas das remoções motivadas pela Barragem de Itaparica ainda são latentes, tanto que em tempos de mais seca, quando a cidade em ruínas emerge na água rasa, muitos ex-moradores cogitam voltar para esta Atlântida inundada, mas não esquecida.            

    Leia na íntegra a carta do encontro:

     

    1º ENCONTRO DAS COMUNIDADES TRADICIONAIS DE ITACURUBA: INDÍGENAS E QUILOMBOLAS

     

    Nós, comunidade quilombola Negros do Gilú, comunidade quilombola Poço dos Cavalos e o povo indígena Pankará, reunidos na Aldeia Pankará Serrote dos Campos, em Itacuruba, Pernambuco, constatamos: Que nossas comunidades vêm sofrendo violações de direitos dos mais diversos tipos, ao longo de nossa história, resultado da ganância das empresas e pela inoperância do Estado brasileiro. Foi assim com a construção da Barragem de Itaparica, quando perdemos parte dos nossos territórios, e está sendo com a lentidão da FUNAI e do INCRA, que além de tudo fica jogando povo contra povo para justificar sua lentidão. Atualmente estamos nos sentindo ameaçados com possibilidade de construção de uma usina nuclear em nosso Município que vai impossibilitar mais uma vez nosso direito territorial.

     

    Reafirmamos a necessidade de demarcar e defender os nossos territórios como forma de garantir as culturas e as vidas das comunidades tradicionais indígenas e quilombola, como também a realização da Reforma Agrária. Sem nossos territórios, perdemos nossa cultura, nossa história e nosso direito de ser indígena e quilombola! Para o Estado brasileiro garantir os direitos das comunidades quilombolas e dos povos indígenas, e em especial no município de Itacuruba – PE, tem que primeiro demarcar nossos territórios, conforme está garantido na Constituição Federal de 1988 e na Convenção 169 da Organização Internacional do Trabalho.

     

    Assumimos o fortalecimento da organização das nossas comunidades e a luta conjunta pela demarcação e garantia dos territórios tradicionais das comunidades indígenas e quilombola. Assumimos o compromisso com cada parente de caminharmos de forma conjunta, organizados e unidos por um projeto de vida que garanta a vida digna, o cuidado com a Mãe Natureza, o respeito aos saberes dos mais velhos e à nossa história neste país. Queremos nos juntar ao Papa Francisco quando afirmou, no encontro Mundial dos Movimentos Populares, que “Nenhum sem teto sem casa, nenhum camponês sem-terra, nenhum trabalhador sem direitos”, completando que, NENHUMA COMUNIDADE TRADICIONAL SEM TERRITÓRIO!!!

     

    Itacuruba, 8 de novembro de 2014

     

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  • 10/11/2014

    Jovem Kaiowá de Pyelito Kue é baleado por seguranças privados no Mato Grosso do Sul

    As demarcações de terra indígenas seguem paralisadas, já para a violência, as porteiras permanecem sempre abertas no estado do Mato Grosso do Sul. Há pouco mais de uma semana, o corpo da jovem Marinalva Guarani-Kaiowá de apenas 27 anos foi encontrado às margens da BR-163, próximo ao município de Dourados. Seu corpo apresentou marcas de 35 golpes por cortes de faca. No entardecer de ontem, 9 de novembro, outro jovem Kaiowá foi vítima de ataque direto, desta vez executado contra um grupo indígena da aldeia de Pyelito Kue, localizada na região de Iguatemi.

    Por sorte, o destino de Adriano Lunes Benites, de 21 anos, foi diferente do de Marinalva. O jovem foi alvejado na perna por uma bala de borracha, conforme constatado em laudo médico, por um “segurança particular”, mas acabou saindo com vida do episódio. Segundo a comunidade de Pyelito, Adriano estava na companhia de outros três jovens, dentre eles, duas mulheres que carregavam crianças de colo e que deixaram a aldeia para buscar Guaviras-  espécie de fruto típico do cerrado- para comer.

    Tendo conseguido as frutas, os indígenas retornavam para casa na estrada pública, divisa entre o Tekoha (Aldeia/lugar onde se é) e os limites da fazenda Cachoeira, quando o grupo ouviu primeiro o barulho de motocicletas se aproximando e logo depois gritos hostis proferidos contra os indígenas. Já era tarde para recuar. Os Kaiowá foram alcançados por dois homens que portavam uniforme de segurança privado e foram reconhecidos pelos indígenas como “contratados” dos fazendeiros da região.

    Os homens chegaram disparando para cima e tão logo alcançaram o grupo indígena, os ameaçaram.  Os seguranças atribuíram ironicamente aos jovens Kaiowá a alcunha de “teimosos” por terem saído do que eles definiram como “o cercado dos índios”. No caso, o cercado referia-se aos limites da área ocupada hoje pelos indígenas.

    Agressivamente disseram que o lugar dos índios ficaria “da cerca para dentro” e que não seria permitido o trânsito de nenhum deles por aquela estrada. Aos gritos anunciaram que os indígenas aprenderiam ainda aquela tarde uma lição. Neste momento quando os indígenas tentaram fugir, os seguranças utilizaram de bombas de gás lacrimogêneo e de spray de pimenta contra o grupo. Os jovens em pânico e completamente atordoados procuraram proteger as crianças que choravam muito. Enquanto isso, os seguranças começavam nova sequência de disparos, desta vez diretamente contra os indígenas.

    Segundo os relatos, as balas rasparam a cabeça das mães ao mesmo tempo em que uma bala de borracha atingiu a perna de Adriano, o jovem caiu no chão e lá permaneceu deitado, sem que nenhum dos indígenas esboçassem qualquer forma de reação. Na sequência, um dos seguranças guardando sua arma passou a andar em círculos em torno de Adriano incitando o indígena a levantar e brigar com ele “de mãos limpas”. Ao ver que Adriano não revidaria os seguranças partiram para insultos verbais, provocando o tempo inteiro os indígenas com frases como: “Queremos ver se vocês são tão valentes agora” e “onde esta o povo indígena”.

    Depois disso, os seguranças se afastaram e subiram novamente em suas motocicletas. Os demais jovens ajudaram Adriano a levantar e começaram arrastá-lo com a maior velocidade que conseguiam pela estrada. Os motoqueiros ao baterem em retirada efetuando os últimos disparados que passaram zunindo sobre a cabeça do grupo Kaiowá.

    Com o barulho, alguns indígenas tomaram o rumo da estrada apela qual Adriano era carregado encontrando em seguida o grupo que ainda se encontrava atordoado pelo efeito do gás lacrimogêneo.

    Por telefone, um dos filhos da Cacique, que por motivos de segurança não será identificado, disse que “a comunidade não vai aceitar nem mais um dia ser tratada desta maneira. Estamos vivendo feito bicho, pior que gado, querem nos cercar, nos manter em cativeiro, com fome, sem saúde, se for assim partiremos para nosso direito e para nosso território”.

    Os indígenas, revoltados, exigem o imediato comparecimento da Funai e da Polícia Federal, em Pyelito Kue, como há muito tem pedido.  Anunciam que não irão ficar calados frente a todo este quadro de violência. Que se acaso não houver o comparecimento dos órgãos, a comunidade de Pyelito entenderá que a única solução possível para seu povo é a retomada imediata de todo o seu território e a expulsão dos fazendeiros das terras indígenas, uma vez que estando por conta e risco, a presença dos fazendeiros continuará significando perigo constante e diário para a comunidade indígena.

    O povo Guarani-Kaiowá de Pyelito vem a tempo denunciando os cercos e ataques realizados por pistoleiros contra sua comunidade. Em fevereiro deste ano, fazendeiros da região de Iguatemi bloquearam as estradas de acesso ao território indígena impedindo o deslocamento dos Kaiowá para fora da aldeia. Até mesmo a Funai foi impedida de prestar atendimento ou socorro aos indígenas. Armados, os fazendeiros falavam abertamente em atacar os Kaiowá no momento em que julgassem oportuno. 

    Em março, disparos foram efetuados por motoqueiros do portão que oferece acesso à aldeia. Esta se tornou uma prática recorrente nos meses sequentes. Já no dia 7 de outubro, ameaças endereçadas às lideranças foram feitas por parte dos fazendeiros e um dos barracos ocupados pelos indígenas chegou a ser incendiado. As ameaças se tornaram atentados concretos. Apenas três noites depois, no dia 10 de outubro, motoqueiros voltaram a disparar contra a comunidade, refugiando-se após os disparos no interior da fazenda Cachoeira. Não bastasse, os fazendeiros voltaram a impedir os indígenas de sair, aterrorizando todas as noites a vida dos Kaiowá.

    Enquanto do lado de fora os pistoleiros rondam, do lado de dentro da aldeia a fome castiga. A situação de extrema miséria dos Kaiowá de Pyelito Kue vem sendo denunciada pelo Cimi há mais de vinte dias.

    Leia mais: No MS, comunidade de Pyelito Kue passa fome e os alimentos são sonegados pelo governo

    Em meio ao cárcere, no dia 12 de outubro uma criança de menos de dois anos de idade, Mikaeli Flores, morreu por desnutrição e ingestão de água imprópria para o consumo.

    No dia 15 de outubro, recém tendo tomado consciência da morte de Mikaeli, em reunião com representantes nacionais da Funai e do Ministério da Justiça (MJ), realizada em Brasília, uma comitiva formada por mais de 40 lideranças Guarani e Kaiowá protocolaram documento pedindo atuação policial e proteção da parte dos órgãos responsáveis aos povos indígenas no Mato Grosso do Sul. Pyelito Kue foi destacada na ocasião como uma das situações mais drásticas enfrentadas pelos Guarani e Kaiowá.

    Enquanto indígenas são mortos, tendo rodovias como cemitérios ou são cercados tendo seu direito de ir e vir tolido pela brutalidade de pistoleiros, o silêncio é a única resposta advinda do Ministério da Justiça e demais órgãos. A morte de Marinalva e os disparos contra Adriano se somam as inúmeras denúncias diárias realizadas por membros de comunidades indígenas espalhadas por todo território brasileiro. Denúncias de violência aberta que no Mato Grosso do Sul manifestasse de maneira ainda mais contundente.

    Enquanto isso, em Brasília os direitos indígenas seguem a perigo dentro da esfera institucional. Açoites aos direitos constitucionalmente conquistados são desferidos por representantes dos poderes Legislativo, Executivo e Judiciário. Em efeito dominó viram jurisprudência e/ou práticas políticas executadas ao nível das comarcas locais. Com isso pistoleiros a serviço dos ruralistas ficam à vontade para realizar contra os povos originários as mais desumanas atrocidades. O fechar das portas para a demarcação das terras indígenas e a abertura das porteiras para a violência são medidas intimamente ligadas, que produzem no final das contas um único resultado, o extermínio progressivo e anunciado dos povos indígenas.   

      

    Matéria atualizada em 10 de novembro, às 22.00h (horário de Brasília)

     

     

     

            

     

                

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  • 10/11/2014

    1° Assembleia do povo Kinikinau determina luta por direitos originários

    Vítimas de remoções forçadas, invasões de fazendeiros e posseiros, o povo Kikikinau foi expulso de seu território tradicional há mais de 100 anos. Porém, um novo despertar ressurge agora na luta pelos direitos originários. Dentre alguns pontos destacados da 1° Assembleia do povo Kinikinau está o compromisso do Estado com a demarcação e devolução das terras tradicionais e instituição de um Conselho do povo Kinikinau.

     

    Confira o documento na íntegra:

     

    O povo Kinikinau ressurge como uma Fênix, que das cinzas desperta para a busca do bem viver baseado em seu território tradicional.

    “Houve tempo que ninguém mais falava em nossa existência, mas entre nós sempre soubemos de nossa origem. Estamos aqui!"

     

     

     

    Nós, povo Kinikinau, para nós Koinukunoen, reunidos na Aldeia Cabeceira, Terra Indígena Nioaque, nos dias 06 a 09 de novembro de 2014, por ocasião da 1ª Assembleia do Povo Kinikinau, viemos a público expor nossa situação.

     

    Nós, Koinukunoen, somos originário desta terra, vivemos durante séculos em nossos territórios e cultivamos junto a nossas terras e nosso povo, nossa língua, costumes, história e organização própria. Durante muito tempo fomos forçados a ficarmos na invisibilidade, por força da ação de posseiros, fazendeiros e do próprio Estado brasileiro. Retalharam nossas terras e desmembraram nosso povo, como forasteiros fomos obrigados a iniciarmos migrações forçadas. Procuramos abrigo e fomos acolhidos por nossos irmãos Terena e Kadiwéu.

     

    Agradecemos a estes povos, mas a acolhida deles não foi suficiente para sanar a dor de vivermos longe do que nos pertence, do que nos foi tomado. Longe de nossas terras tivemos problemas e vivemos mais de um século de violência. Fomos expulsos de nosso território há mais de 100 anos e hoje estamos levantando para lutar pelo nosso bem viver, pois com nossos velhos seguiu nossa cultura e nosso conhecimento, e este saber e identidade seguirão com nossos filhos de agora e para sempre.

     

    Nossa terra foi invadida por fazendeiros que destruíram nossa natureza, nossas casas e nos expulsaram. Nossas famílias foram removidas pelo Serviço de Proteção ao Índio (SPI) e ficamos esparramados por territórios alheios.


    Leia mais: Após um século de descaminhos, povo Kinikinau realiza sua primeira assembleia fortalecendo a identidade na luta pelo bem viver

     

     

    Nosso bem viver tem como fundamento nossa mãe terra, nosso território tradicional de onde fomos retirados à força, com o aval do braço estatal. O Estado brasileiro está em dívida com o povo Kinikinau, pois durante muito tempo nos negou o reconhecimento enquanto povo e até hoje nos nega o acesso ao nosso território tradicional.

     

    Reafirmamos que somos povo indígena originário desta terra e iremos retomar nossa dignidade de vida. Nossos anciãos, mulheres e jovens clamam pelo nosso território.

     

    Houve tempo que ninguém mais falava em nossa existência, o próprio órgão indigenista oficial não reconhecia o povo Kinikinau, fomos forçados a retirar nossos nomes originários dos documentos e riscados dos documentos oficiais como se não tivéssemos história, mas entre nós sempre soubemos de nossa origem e reafirmamos que estamos aqui!

     

    Estamos aqui e exigimos a devolução e demarcação de nosso território tradicional.

     

    Encaminhamentos:

     

    Fica constituído o Conselho do Povo Kinikinau, organização tradicional do povo Kinikinau, formada por nossas lideranças tradicionais com fundamento nos artigos 231 e 232 da Constituição Federal de 1988. Esta organização nos representará judicial e extrajudicialmente defendendo nossos direitos e garantias fundamentais. Será a partir dela que manteremos nossa unidade e nos movimentaremos e transformaremos em realidade um século de espera.

      

    O Conselho do Povo Kinikinau atuará em colaboração com o Conselho do Povo Terena e Conselho Aty Guasu Guarani Kaiowá e integrará a Articulação dos Povos Indígenas do Brasil  (Apib).

     

    Juntos, os povos indígenas estarão lutando pela manutenção de nossos direitos historicamente conquistados e contra os ataques que temos sofrido. 

     

    Exigimos que o Estado brasileiro cumpra a Constituição Federal e reconheça o nosso território tradicional.

     

    Exigimos que a Fundação Nacional do índio (Funai) constitua o Grupo de Trabalho (GT) para iniciar a identificação e delimitação do território tradicional do povo Kinikinau.

     

    Fica decidido que a Funai, a Secretaria Especial de Saúde Indígena (Sesai) e Ministério Público Federal (MPF) atenderá o povo Kinikinau respeitando nossas especificidade, organização e decisões internas, observando os princípios da consulta e consentimento prévio, livre e informado; o princípio da identidade cultural; princípio de nossa autodeterminação da Convenção 169 da Organização Internacional do Trabalho (OIT).

    Fica decidido que a 2ª Assembleia do Povo Kinikinau será realizado na Aldeia Cabeceira, Terra Indígena Nioaque, em 2015.

     

    Foram escolhidos para compor o Conselho do Povo Kinikinau: Nicolau Flores, Rosangela Mattos, Flaviana Roberto Fernandes, Albino Pereira Cece, Joel Marques, Zeferino Albuquerque, Geltrudes Anastácio Rosa, Genilson Roberto Flores, Rosaldo Albuquerque Souza, Edina Marques da Silva e Inácio Roberto.

     

    Aldeia Cabeceira, 09 de novembro de 2014.

     

    Koinukunoen, despertando para os seus direitos!

    Nós estamos aqui!

     

     

     

     

     

     

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  • 09/11/2014

    Após um século de descaminhos, povo Kinikinau realiza sua primeira assembleia fortalecendo a identidade na luta pelo bem viver

    Pouco a pouco as pessoas foram chegando e tomando seus lugares debaixo de um puxado de palha, entendido a partir do espaço de um centro comunitário, localizado na Aldeia Terena de Cabeceira em Nioaque (MS). Acima da mesa, em palavras fortes e precisas, podia-se ler: “Povo Kinikinau fortalecendo a identidade na luta pelo bem viver”. Após mais de um século de descaminhos, aconteceu a 1° Assembleia do Povo Kinikinau, entre os dias 6 a 9 de novembro.

    Na medida em que as primeiras palavras foram sendo ditas, a memória pediu licença para adentrar a reunião e a história sentiu nas linhas do tempo que seu curso definitivamente está para ser mudado. No semblante seguro dos mais velhos, no sorriso afirmado dos jovens e crianças, na força dos homens e mulheres e nos ditos gerais, entoados cada vez mais firmes “Eu sou Kinikinau”, pouco a pouco este povo vai dando os primeiros passos na reconstrução seu próprio destino, reafirmando sua identidade e retomando o curso da vivência plena de seu modo de ser. Tesouros que a duras penas lhes foram retirados no passado. 

    Sem território próprio, vindos das aldeias de São João (Reserva Indígena Kadiwéu) e das Aldeias Terena de Mãe Terra, Limão Verde, Cachoeirinha, Cabeceira, Lalima, entre outras, os Kinikinau durante a assembleia foram se reagrupando em torno da ideia de diversos grupos familiares, hoje divididos, que constituem um único povo comum. Para além do povo Kinikinau, de seus estudiosos e sabedores (tradicionais e acadêmicos), se fizeram presentes também representantes do povo Terena, Guarani e Kaiowá, Atikum e estudiosos não indígenas que são referência na história e cultura Kinikinau como Aila Villela Bolzan, Giovane José da Silva e Iara Quelho de Castro.  

    Palavras que irrompem, caminhos que se encontram

    Políticas governamentais de redução territorial e uma onda sistemática de perseguições de fazendeiros, posseiros e invasores significaram para os Kinikinau, no Mato Grosso do Sul, o peso inimaginável de mais de cinco séculos de dispersões forçadas, o retalhamento de seu povo e o desmembramento total de seus territórios.

    Quando em 1940, após muito translado, um pequeno grupo fixou-se na aldeia de São João em terras pertencentes ao povo Kadiwéu, local que vivem até hoje, muitos estragos já haviam sido infligidos a outros grupos Kinikinau. Estes, sistematicamente expulsos de suas terras tradicionais, acabaram por ter de viver de uma espécie de “empréstimos territoriais”, sendo acolhidos em meio a terras e grupos Indígenas Terena. Assim, os Kinikinau foram transformados em um povo “forasteiro”.

    Até hoje, os indígenas Kinikinau, por terem sido vítimas das pressões dos fazendeiros e políticas de esbulho, sofrem violência física e psicológica constantes em alguns dos territórios que ocupam. Sendo chamados até de povo que “vive de favor” entre outros povos indígenas, os Kinikinau jamais conseguiu se enraizar de maneira plena, sendo por vezes seus membros menosprezados por alguns ocupantes tradicionais destas terras. A própria natureza das negociações entre órgãos governamentais, em especial o SPI, e grupos dos povos indígenas que acabaram por “acolher” o povo Kinikinau, acabou por reservar historicamente para os últimos o caráter de “prestadores de serviço” de seus anfitriões.       

    Com as vidas fragmentadas passaram a ter negado também seu reconhecimento étnico pelos próprios órgãos indigenistas oficiais, Serviço de Proteção ao Índio  (SPI) e depois pela Fundação Nacional do Índio (Funai). Como se não bastassem as perseguições e migrações físicas, os Kinikinau tiveram de enfrentar o peso da invisibilidade, alicerçado pelas mãos de estudiosos que passaram a tecer teorias do desaparecimento ou simplesmente pelo esquecimento seletivo da memória, deixando de constar referências desta etnia nos documentos oficiais.

    Perseguidos tiveram de trocar, sobretudo arbitrariamente, seus sobrenomes retirando de seus documentos e registros, as referências que os identificavam como pertencentes à etnia Kinikinau. Assumiu este povo, de maneira forçada, identidades alheias e impróprios destinos. Considerados subgrupo Terena por muitos anos passaram a viver nas sombras de outros povos em aparente silêncio, mas nunca esqueceram de quem são e nem de sentir o que é ser Kinikinau. Silêncio este aparente apenas para quem os via de fora. Dentro de cada um e cada uma, em cada peito, permaneceram cultivando todos os dias sua tradição e sabedoria e as repassaram dia após dia para seus filhos. Os anciões sabiam que cedo ou tarde chegaria o dia do novo despertar e por esforço próprio este povo construiu esta assembleia que significa os primeiros passos contra os malefícios de mais de um século de opressões e dispersões.

    Flaviana Roberto Fernandes, mulher e ceramista Kinikinau, que pelo peso das dificuldades teve de deixar a antiga Aldeia São João, relata o que significa estar longe de seus território e povo: “A gente se sente sozinha porque a gente teve a vida interrompida, deixamos familiares e tivemos que sair da associação (de ceramistas) que tínhamos lá. Sofremos ameaças e o medo que a gente sente faz a gente trocar de lugar, viver de lugar para outro. A gente precisa de nossa terra, não sabe como juntar nosso povo de novo e mesmo que junte não poderá ser fora de nosso lugar. Precisamos nos juntar em território nosso, na nossa terra tradicional. Nós não queremos deixar do nosso costume, temos língua diferente, trajes, nosso jeito mesmo, isso só teremos em nossa terra”.

    Genoveva Roberto Flores, também ceramista e mulher Kinikinau, complementa: “Fora de nossa terra nossos costumes são afetados de todos os jeitos. Desde crianças, de muito novinhos, com cinco ou seis anos, eles começam a trabalhar e aprender a ser kininkinau, a se colocar no mundo Kinikinau e participar dos dias de nosso povo. Não temos mais como fazer isso e isso nos traz dor. Fora da terra não tem como viver nossa cultura, nossos filhos não estão aprendendo a ser Kinikinau”.

    Esta primeira assembleia pode ser considerada como um despertar coletiva dos Kinikinau por ser fruto proveniente de dor compartilhada e sentida nas mais diversas aldeias em que vivem os filhos deste povo. Preocupados com a continuidade de sua trajetória e com as futuras gerações, cansaram de viver alheios aos seus territórios e sem a possibilidade de dividir com os seus pares os hábitos e costumes que os caracterizam como grupo. Nicolau Flores, Kinikinau que vive na terra Kadiwéu, especificamente na Aldeia São João, traduz este sentimento em palavras. “É muito duro crescer assumindo ser outro uma vez que todo povo é diferente e cada um precisa de seu espaço. Nós temos ainda onde morar e o que comer, sabemos quem somos, mas e nossos filhos, o que será deles? Como será nosso futuro se não tivermos nossa terra e nossa cultura? Será que teremos que escutar nossos filhos perguntando a nós, que somos seus pais e o que deixamos para eles enquanto sabíamos que vivíamos em terras alheias?”

    Para Inácio Roberto, professor Kinikinau. “A 1° Assembleia do Povo Kinikinau significa o fortalecimento deste povo que nunca deixou de existir, mas que agora reassume a sua grandeza histórica”.

    O fato de tão importante assembleia ser realizada na Terra Indígena Terena de Nioaque denuncia por si só os problemas da falta de ocupação de espaço próprio pelos Kinikinau. Hoje suas terras tradicionais encontram-se na mão de fazendeiros. Porém o fato também revela a solidariedade do povo Terena junto à luta dos Kinikinau que, assim como representantes do conselho Aty Guasu do povo Guarani e Kaiowá, se fizeram presentes no encontro e assumiram compromisso conjunto de buscar junto a este povo a superação destas mazelas históricas que há muito lhes aflige. Genilson Roberto Flores Kinikinau em seu pronunciamento emocionado fez referencia ao fato. “Eu sou Kinikinau, vocês são Kinikinau, nós sabemos, sempre soubemos. Antes estávamos sozinhos. Era difícil dizer isso e por isso vivemos calados, mas agora com nossa união e nossos parentes não temos mais medo, não calaremos mais”.

    Na assembleia falas fortes como a proferida por Albino Kinikinau trouxeram à tona o tamanho da dor de todo um povo: “É duro ver o povo massacrado, ver o povo ser queimado vivo, tentar se levantar e ser expulso a bala. Mas até hoje o povo resiste e chegou a hora de resistir novamente. Se for para lutar lutaremos, todos juntos, todos os Kinikinau que são muitos e sabemos onde estão. Juntos buscaremos nossos direitos”.             

    Os Kinikinau nunca adormecidos, simplesmente decidiram andar os caminhos reversos daqueles que os separaram. Percorrendo vias simbólicas se reagruparam para se reafirmar e dividir os frutos de uma cultura salvaguardada junto a cada família por gerações. “Em um só homem ou mulher que desperta e caminha, é toda uma família que se levanta”, diz Nicolau. Nas palavras de Nicolau a essência da caminhada: “Vivemos como se calados em outras aldeias, quem nos olha não sabe o que guardamos, o que somos, acha que somos apenas como os outros. Mas cada árvore dá seu fruto, com seu cheiro e seu sabor próprio, precisamos buscar nossos galhos, nossa própria árvore.” Que a partir desta histórica assembleia, novamente exale para fora do exílio e seja sentido por todos os gostos e cheiros do povo e cultura kinikinau. UNATI APEYEÁ KOINUKUNOEM! (Viva o povo Kinikinau!). 

     

     

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  • 07/11/2014

    Moção ABA contra a reportagem anti-indígena finalista no Prêmio Esso

    Moção ABA à Assembleia da ANPOCS

    Aos Organizadores do Prêmio Esso de Jornalismo

    A Associação Brasileira de Antropologia (ABA) manifesta seu desapontamento ao tomar conhecimento, que entre os finalistas do tradicional e conceituado “Premio Esso de Jornalismo” encontra-se uma reportagem sobre Índios Guarani de Morros dos Cavalos (SC), intitulada: “Terra Contestada”. Esta reportagem busca infirmar os direitos constitucionais e territoriais indígenas, distorce fatos, inverte imagens, apresenta inverdades, estimula controvérsias, lança impropriedades, questiona e acusa profissionais da antropologia, assim como atribui a responsabilidade a comunidade indígena Guarani de Morros dos Cavalos, por atrasos na duplicação da rodovia da BR 101 e na construção de dois túneis, culpando-a por atropelamentos e acidentes, que ocorrem na rodovia, apontando-a de serem empecilhos ao desenvolvimento, e apresentando-a como chaga e estorvo no litoral catarinense. Caso essa reportagem seja premiada o Prêmio Esso de Jornalismo será conivente com inverdades e estará de fato contrariando a imprensa imparcial e comprometida com os direitos humanos características dos prêmios anteriores.

    Moção apresentada pela ABA e aprovada na Assembleia da ANPOCS, realizada no dia 30/10/2014, em Caxambu-MG.
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  • 07/11/2014

    União Europeia ouve clamores de comunidades tradicionais na Bahia em audiência pública e visita aldeia Tupinamba

    A violação de Direitos Humanos e o crescente aumento da violência contra as comunidades tradicionais trouxeram à região sul da Bahia, no dia 1º de novembro, diversos embaixadores da União Europeia e representantes da Secretaria Especial de Direitos Humanos da Presidência da República, além da Secretária Estadual da Justiça, Cidadania e Direitos Humanos da Bahia. Assista às denúncias apresentadas durante audiência pública realizada com representantes de comunidades tradicionais que tem constantemente seus direitos desrespeitados.

     

    Junto com estes representantes vieram os deputados estaduais Yulo Oiticica e Bira Coroa, que se somaram a dezenas de entidades da sociedade civil organizada, ONGs, Pastorais da Igreja Católica, religiosos e religiosas, movimentos de luta pela terra, assentados, acampados, quilombolas, vereadores, comerciantes e empresários da região, e diversas etnias indígenas, para um encontro na Aldeia Serra do Padeiro, no município de Buerarema, realizado no dia 1º de novembro último, com o objetivo de refletir sobre esta problemática da violência, e juntos buscarem solução para esta situação que vivenciam estas comunidades.

     

    Cerca de 400 pessoas tiveram, então, a oportunidade de ritualizarem seus anseios no grande Toré celebrado pelos Tupinambá e outros povos presentes no evento, socializaram suas angústias na grande plenária através das falas e entregas de documentos e dossiês, se alimentaram de esperança e força, não só da deliciosa e farta alimentação proporcionada pela comunidade da Serra do Padeiro, mas também da sua resistência e confiança nos encantados. Puderam, também, contemplar nas visitas feitas e nas “conversas de pé de ouvido” uma possibilidade de uma “nova sociedade possível”, alicerçada no respeito ao ser humano e à natureza. Ao atravessarem a ponte construída com muita força de vontade pelos Tupinambá, diante da omissão do estado, a comunidade convidava a todos a construírem “novas pontes”, novos caminhos e novas perspectivas. Ao final da ponte chegaram a Unacau, território retomado pelos Tupinambá em maio de 2012. Este conjunto de fazendas, que soma 2.064 hectares – em que se produzia cacau e, posteriormente, café e palmito -, foi durante muitos anos símbolo de “desenvolvimento” e muitos recursos públicos ali foram investidos. Mas o que ninguém divulgava é que ali também se usava de mecanismos de expropriação fundiária, como grilagens de terras e ameaças. Nos tempos da Unacau e das empresas que a sucederam, registrou-se a ocorrência de trabalho escravo e também de intensos ataques ao ambiente, notadamente o desmatamento de grandes áreas. O grande sonho da comunidade Tupinambá é transformar este espaço que causou tantas mortes e sofrimento no passado, em um espaço de vida, instalando ali a primeira universidade indígena do Brasil.

     


    A comitiva da União Europeia, com a presença de nove Embaixadas (Bélgica, Suécia, Reino Unido, Eslovênia, Finlândia, Espanha, França, Holanda, Irlanda), dois Consulados e a chefe da delegação da União Europeia, Sra. Ana Paula Zacarias (Portugal), ouviram atentamente os relatos de violência física, psicológica e cultural, criminalização de lideranças, judicialização das lutas, desrespeito às culturas e povos, preconceito, genocídios, crimes contra a natureza, avanços de empreendimentos com o capital europeu sobre territórios tradicionais, violação de direitos, falta de políticas públicas, assim como descumprimento e ataques a direitos constitucionais duramente conquistados. Ao final dos relatos, a chefe da delegação se comprometeu em ler atentamente e divulgar os documentos entregues, além de recomendar às autoridades brasileiras mais atenção e cuidado com as comunidades, e lutar pela garantia dos Direitos Humanos. Ela afirmou que “A defesa dos Direitos Humanos é fundamental para o povo, não queremos e não vamos interferir na politica nacional, mas também entendemos que só juntos (todos os países) é que poderemos resolver os problemas de desigualdades”. “Estamos aqui para ouvir e para aprender com vocês sobre as populações tradicionais no Brasil, queremos e vamos contribuir. As contradições aqui ditas deste governo não existem só aqui, as contradições existem em todo lugar”, completou Ana Zacarias.


    No dia anterior, 31 de outubro, no Palácio da Reitoria da Universidade Federal da Bahia, em Salvador, a Secretaria Nacional de Direitos Humanos da Presidência da República, em parceria com esta mesma Delegação da União Europeia no Brasil, realizou uma audiência pública. Diante do salão lotado de representantes das comunidades Quilombolas, Indiìgenas, Fundo e Fecho de Pasto, Pescadores, representantes de ONG´s e do governo, os mesmos denunciaram atos de violência sofridos por eles. Chamou a atenção as graves denúncias feitas pela representante do Quilombo Rio dos Macacos, Rosemeire dos Santos, que afirmou que o local eì ocupado pela comunidade haì mais de 200 anos, e atualmente a instituição militar reivindica sua desocupação para atender a necessidades futuras da Marinha.


    Já Edmilson dos Santos, presidente da Associação de Serra do Bode, em Monte Santo (a 352 km da capital), relatou o sofrimento dos pequenos produtores diante da expansão do agronegócio. “Eles (os grandes produtores) matam mesmo, querem nos expulsar de nossas terras. Muitos saÞo assassinados e depois os fazendeiros dizem que eram bandidos”. A indignação diante das violações dos Direitos Humanos sofridas pelos representantes das comunidades foi partilhada pelo Coordenador do Programa de Proteção aos Defensores de Direitos Humanos na Bahia, José Carvalho, que ao se referir à situação do povo Xacriabá da Aldeia dos Porcos de Cocos, Bahia, relatou que ficou estarrecido com o completo abandono da comunidade pelas instituições governamentais.  



    Nesse evento, também foi lançado o livro “10 Faces da Luta pelos Direitos Humanos no Brasil”. O livro traz experiências de Dez destacados Defensores de Direitos Humanos, que estão inseridos no Programa de Proteção da Secretaria de Direitos Humanos, e que são expressão da luta por Direitos Humanos. Dentre eles se destacam na questão indígena os caciques Deoclides, da etnia Kaingang, e Rosivaldo/Babau, da etnia Tupinambá.

    Ana Paula Zacarias – Embaixadora da União Europeia no Brasil

    Jozef Smits – Embaixador da Bélgica no Brasil

     



    Milena Šmit, Embaixadora da Eslovênia

     

    Wellington Pantaleão da Silva – Secretaria de Direitos Humanos da Presidência da República

    Ariselma Pereira, Secretaria de Justiça, Cidadania e Direitos Humanos do Estado da Bahia



    Eduardo Oliveira – CIMI (Conselho Indigenista Missionário)

    Cacique Babau Tupinambá – Serra do Padeiro, BA

     



    Cacique Deoclides, Povo Kaingang da Terra Indigena Candóia, RS


    Rosemeire dos Santos – Quilombo Rio dos Macacos, BA

    Cacique Divalci do Povo Xacriabá, Aldeia dos Porcos, BA



    Cacique Nailton do Povo Pataxó Hã-Ha-Hãe, BA

    Cacique Cícero do Povo Tumbalalá, BA
     

    Cacique Aruã
     

    Moah da UNEGRO – Extremo Sul da Bahia, BA
     

    Cacique Valdelice e Zé Domingos do Povo Tupinambá de Olivença, BA

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  • 06/11/2014

    Deputado pede imediata revogação da prisão do cacique Elton Oliveira Suruí

    O cacique Elton John Oliveira Suruí, da aldeia Itahy, do povo Aikewara (também conhecido como “Suruí do Pará”), foi preso no dia 29 deste mês, na sede da Funai, em Marabá e trazido para Belém, onde permanece preso. Segundo informações da imprensa, ele teria sido preso na sede da Funai, logo após ser convocado pela Polícia Federal para prestar esclarecimentos. O funcionário Eric Belém de Oliveira foi até a sede da PF, logo depois, para prestar assistência e acompanhar Elton. No entanto, ao chegar lá foi informado que o depoimento do cacique suruí já teria sido colhido, sem a presença de advogado ou funcionário da Funai, e que ele já teria recebido ordem de prisão. Em seguida, o indígena foi transferido às pressas para Belém.


    Familiares de Elton acusam a Polícia Federal de agir politicamente. Segundo Clelton Suruí, irmão do cacique, a prisão está ligada a denúncias de corrupção no sistema de saúde feitas pelos indígenas: Elton teria descoberto que estava havendo desvio de verba na saúde indígena e denunciou isso. A partir daí, o cacique começou a ser alvo de perseguição política, inclusive feita pela Sesai (Secretaria especial de Saúde Indígena). É um jogo politico.

     

    Cleiton e demais familiares do indígena acreditam que o objetivo da prisão é desarticular o movimento indígena da região de Marabá para que não sejam investigadas as denúncias.

    Vale destacar que, este ano, 14 indígenas Aikewara (Suruí) foram indenizados pela Comissão de Anistia. Na ocasião, o presidente da Comissão, Paulo Abrão, pediu desculpas pela ação do Estado brasileiro: “O conjunto de uma comunidade indígena também foi vítima da ditadura militar e essa repressão que aconteceu ao povo que vivia em torno da região da Guerrilha do Araguaia atingiu não apenas os camponeses, os guerrilheiros, mas também as comunidades indígenas que lá estavam”.

     

    Chama a atenção que a Polícia Federal no Pará, por meio de seu assessor Fernando Sergio Castro, não reconheça nenhuma falha na forma com que a prisão e o depoimento do cacique foram executados. Além disso, a PF alega que o cacique Elton responde a vários processos na Justiça Federal, por diferentes motivos. O último de que foi acusado é o de sequestrar um ônibus na aldeia, com motorista e cobrador, para forçar a cooperativa proprietária do veículo a transportar gratuitamente a etnia local. Esse seria o último caso, segundo a PF.


    Elton foi algemado e preso. Depois transferido para Belém. O assessor de imprensa da PF ainda chegou a questionar se o cacique Elton era mesmo um indígena, alegando o fato dele ter carteira de identidade e conta bancária. Ora, senhores deputados e senhoras deputadas, esse é um dos muitos desrespeitos aos direitos indígenas que estão sendo praticados em nosso estado e país, pois não cabe a PF questionar a autenticidade de um indígena, pois não se trata de matéria de sua competência e tal questionamento aponta para uma prática de preconceito e racismo.

     

    Segundo a imprensa também noticiou o Ministério Público Federal enviou à Justiça Federal de Marabá pedido de reconsideração para que seja revogada a prisão preventiva decretada contra o cacique Elton Suruí, Para o MPF não estão presentes os requisitos mínimos que justifiquem a prisão preventiva. Nem o MPF, nem a Fundação Nacional do Índio (Funai) foram ouvidos pelo juiz federal Heitor Moura Gomes, que decretou a prisão.

     

    Além disso, segundo argumenta o MPF, o cacique Elton Suruí é importante liderança do povo Aikewara, e vem conduzindo, desde 2013, uma série de mobilizações reivindicando a solução de problemas no atendimento à saúde do povo indígena e a compensação pela construção da BR-153, que corta a terra indígena. Os protestos, por várias vezes, ocorreram com a presença de outras etnias, também prejudicadas pela precariedade do atendimento prestado pela Secretaria de Saúde Indígena, ligada ao Ministério da Saúde.

     

    Por fatos supostamente ocorridos no dia 5 de agosto, a delegacia da Polícia Federal de Marabá abriu um inquérito, datado do último dia 22 de setembro. Em 2 de outubro passado, o delegado responsável pela investigação enviou pedido à Funai de Marabá para que o cacique Elton comparecesse à delegacia e agendou o depoimento para o dia 3 de fevereiro de 2015. Porém, duas semanas após designar para fevereiro a data da oitiva, a autoridade policial representou pela prisão preventiva, sem que houvesse qualquer fato novo nos autos.

     

    O MPF lembra também que segundo jurisprudência no Supremo Tribunal Federal só é admitida a prisão preventiva após demonstração da gravidade concreta dos fatos e não apenas uma gravidade abstrata, suposta ou pressuposta. Ocorre que, mesmo com vários argumentos jurídicos concretos, a Justiça Federal em Marabá negou, na noite de sexta-feira 31 de outubro, recursos do Ministério Publico Federal e da Funai pedindo a liberdade provisória de Elton. Ele segue preso em Belém até a noite do sábado 1 de novembro.

     

    Diante do exposto, senhores deputados e senhoras deputadas manifesto por meio deste requerimento, nos termos regimentais, meu repúdio diante das flagrantes ilegalidades que marcaram a prisão de Elton Suruí, ao mesmo tempo em que demando a imediata revogação de sua prisão preventiva, conforme está sendo defendido pelos movimentos sociais, pela Funai e pelo Ministério Público Federal (MPF).

     

    Nesta oportunidade, reitero minha irrestrita solidariedade ao indígena preso e ao seu povo, que tem sido símbolo de resistência em nosso estado contra a violação dos direitos indígenas e ambientais.

     

    Além disso, requeiro que esta casa encaminhe ofício ao Ministério Público Federal (MPF), em Marabá, e à Justiça Federal no mesmo município, com um apelo pela soltura do indígena, para que ele possa responder pelo processo em sua aldeia. Também requeiro que seja encaminhado ofício para o Ministério da Justiça, em Brasília, com o mesmo apelo.

     

    Por fim, que seja dado conhecimento do teor integral deste documento à Fundação Nacional do Índio (Funai), à Ordem dos Advogados do Brasil (OAB-Pará), ao Conselho Indigenista Missionário (CIMI-Norte 2) e à Articulação dos Povos Indígenas do Brasil (Apib).


     

    Palácio Cabanagem, 04 de novembro de 2014.

    Deputado Edmilson Rodrigues
    Líder do PSOL


     Confira: depoimento da família de Welton Suruí sobre sua prisão


     

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