Pueblo Xukuru marcha el 20 de mayo, en recuerdo de la fecha en que fue asesinado Cacique Xikão. Foto: Renato Santana/Cimi

Es la primera vez que Brasil es juzgado por violaciones de derechos de los pueblos indígenas

El Estado de Brasil será juzgado por la Corte Interamericana de Derechos Humanos por la violación de los derechos del Pueblo indígena Xucuru este martes,  el 21 de marzo. Es la primera vez que el estado de Brasil es demandado en una Corte Internacional por violaciones de derechos de los pueblos indígenas. Durante el la audiencia de juzgamiento la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, los Representantes de las victimas y el Estado presentaran sus alegatos. La audiencia va a ser realizada en la ciudad de Guatemala, empezando al medio día hora de Brasil.

La Corte analizará la violación al derecho a la propiedad colectiva del pueblo indígena Xucuru de Ororubá y sus miembros como consecuencia de la demora en la demarcación de sus tierras ancestrales y la inefectividad de la protección judicial en garantir tal derecho, así como la ausencia de remedio judicial efectivo. Asimismo, la Corte analizará la violación al derecho a la integridad personal, todos protegidos por la Convención Americana sobre Derechos humanos, ratificada por Brasil en 1992.

Entre el inicio del proceso de reconocimiento, titulación, demarcación y delimitación de sus tierras y territorios ancestrales en el año1989 y la homologación en el año 2001, se pasaron 12 años. El registro legal de las tierras Xukuru solamente ocurrió en 2005, cuatro años más tarde. Todavía, hasta esa fecha el Estado no ha concluido el saneamiento total de dichas tierras y territorios ni tampoco ha garantizado el derecho a la propiedad al pueblo indígena, una vez que ese sigue sufriendo con la presencia de los ocupantes no-indígenas en su tierra indígena.

El caso es aún mas relevante en razón del problema ter sido arrastrado prácticamente desde la promulgación de la Constitución Federal en 1988, que en teoría debería garantizar los derechos de los pueblos indígenas. Este caso y proceso ha sido marcado por violencia y criminalización de ese pueblo indígena. Entre 1992 y 2003 cinco indígenas Xukuru han sido asesinados y sus muertes estaban directamente relacionada con la lucha por la tierra y territorio. El conflicto también ha hecho como victima el procurador de la Fundación Nacional del Indio (FUNAI).

“Este juzgamiento trae la posibilidad de una reparación histórica en el proceso de lucha del pueblo indígena por la demarcación territorial, que ha costado las vidas de muchas personas. El Estado ha tenido todas las condiciones para avanzar el proceso administrativo sin tener que exponer los lideres Xukuru a asesinatos, violencia y criminalización, pero el Estado no cumplió con sus obligaciones”, afirma el líder indígena Cacique Marcos Xukuru, que estará presente en la audiencia en Guatemala.

El Cacique Marcos Xukuru ha sido victima de un atentado que resultó en la muerte de dos otros indígenas. Cacique Marcos es el hijo de Cacique Xikão Xukuru, un importante líder indígena asesinado en 1998.

Cacique Marcos Xukuru (centro) se encuentra en Guatemala para seguir el juicio. En la foto, Paje Zequinha, cuyo hijo fue asesinado en 1995, habla por el micrófono. Foto: Renato Santana/Cimi

Procedimiento

El caso Xukuru ha sido presentado ante la Comision Interamericana de Derechos humanos en el 2002. En el informe de Fondo del caso, que ha sido hecho publico en julio del 2015, la Comisión concluyó que el Estado de Brasil es responsable internacionalmente por violaciones de derechos humanos en contra del Pueblo Xukuru y ha hecho recomendaciones, ninguna de las cuales han sido cumplidas hasta la fecha.

Por esa razón en marzo del 2016, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos ha decidido someter el caso a la Corte Interamericana. Los representantes del Pueblo Xukuru ante la Corte Interamericana son el “Movimento Nacional de Direitos Humanos (MNDH/Northeast Region)”, el “Gabinete de Assessoria Jurídica às Organizações Populares (GAJOP)”, el  Conselho Indigenista Missionário (Cimi) y la Justiça Global.

La audiencia de este martes va a ser la primera y única audiencia durante todo el proceso de ese caso. Después de la audiencia, los representantes de las victimas, la Comisión y el Estado tendrán hasta el día 24 de abril para presentar alegatos finales escritos para que la Corte presente su sentencia en el caso condenando o absolviendo el Estado de Brasil de las violaciones.

La lucha del Pueblo Xukuru es un ejemplo emblemático de los retos que los pueblos indígenas enfrentan en Brasil. El juzgamiento ante la Corte Interamericana también representa el reconocimiento de que las violaciones de derechos de los pueblos indígenas han empeorado en Brasil.

“Muchos pueblos indígenas en Brasil tienen que esperar 20 o 30 años mientras los procesos se arrastran y resultan en violencia y criminalización en contra de indígenas” evalúa Cacique Marcos Xukuru. “Hay una variedad de acciones que el Estado de Brasil ha tomado que ha tornado inviable el reconocimiento de nuestras tierras y territorios y la realización de los derechos que nosotros tenemos. Sin una voz para confrontar el Estado, estamos en una posición muy vulnerable. Nosotros no podemos ver otra manera de solucionar la situación que no sea por medio de la presión internacional”.

Histórico del caso

La Serra Ororubá en Pesqueira, Pernambuco, es una municipalidad localizada en el Vale do Ipojuca y ha sido el escenario hace más de trecientos años del saqueo y muerte del Pueblo Xukuru. Todavía, durante los años 1980s esa trayectoria empezó a cambiar. Con el nombramiento de Xikão como líder (Cacique), los Xukurus empezaron a se movilizar y articular. Después de veinte años de lucha, en el año 2001 ellos finalmente recibieron la homologación de 27,555 hectáreas (ha) de tierras en el cual ellos viven. Estas mismas tierras que han visto las muertes de muchos indígenas son hoy la morada de 11 mil indígenas que luchan diariamente en contra de perjuicio, violencia y por la sobrevivencia, en el intento de mantener viva la cultura Xukuru.

Con el ende del régimen militar y la transición democrática, la Constituyente del 1988 se ha tornado el centro de la lucha del movimiento indígena. En Brasilia, Xikão y otros importantes lideres indígenas y apoyadores o promotores de los derechos indígenas visitaron oficinas, agregaron apoyadores, discutieron propuestas, organizaron marchas y protestas y en fin han podido ver los derechos originarios de los pueblos indígenas a sus tierras y territorios tradicionales entraren en la nueva Constitución.

La victoria fortaleció los Xukurus y en 1990 ellos empezaron la retomada de partes de sus tierras y territorios tradicionales, mientras esperaban por la demarcación de sus tierras por el Estado. Durante los años 1990s, en razón de los retrasos en la demarcación territorial y sucesivas retomadas de tierra llevaron hacendados a reaccionar. En 1992 el hijo de Pajé Zequinha ha sido asesinado y en 1995 el abogado de la asociación, que era también procurador de la FUNAI, el señor Geraldo Rolim fue asesinado con tiros e su espalda.

Xikão siempre creyó que la base para el cambio de su grupo estaba en la educación y organización. Promovió la creación de comisiones de salud y educación en las aldeas así como la asociación Xukuru. Un sistema que todavía funciona hasta hoy y estimula la participación de los indígenas en las decisiones del grupo, que son generalmente discutidas en asambleas y seminarios. En la mañana del 20 de mayo de 1998, Xikão dejó su casa en el barrio Xukuru de Pesqueira, cuando percibió la llegada de un pistolero. ‘El no ha tenido chance de se defender. El asesinato de Xikão ha tenido repercusión internacional y ha movilizado su pueblo. Tres años después, el líder de la comunidad Pé de Serra, Chico Quelé también ha sido asesinado.

El 7 de febrero del 2003, dos años después de la homologación del territorio Xukuru, la historia iba a repetirse una vez más. Un intento de asesinato en contra de Cacique Marcos, hijo y sucesor de Cacique Xikão resultó en la muerte de dos indígenas que estaban responsables por su seguridad. Al saber del intento de asesinato, los Xukuru reaccionaron. En la noche de carnaval de aquél año, un sendero de humo en el cielo indicaba que la Vila de Cimbres había sido retomada por los Xukuru, 300 años después de haber sido construida sobre el territorio sagrado Xukuru por colonizadores portugueses.

Criminalización

La reacción de los Xukuru resultó en la condena de 35 indígenas, incluso Cacique Marcos, a una sentencia de 4 años de cárcel. Las investigaciones y denuncias afirmaron que Marcos había armado el ataque en su contra y la muerte de los dos indígenas que eran responsables por su seguridad para intensificar la revuelta en contra de la ciudad para expulsar las familias no indígenas de la villa. Cacique Marcos ha tenido su sentencia reducida a cuatro años por el Tribunal Regional Federal (TRF 5). La misma estrategia de criminalización ha sido utilizada en las investigaciones de los asesinatos del Cacique Xikão y Chico Quelé, por los cuales indígenas Xukuru han sido responsabilizados por los asesinatos. Dieciséis años después de la homologación de la tierra Xucuru, el Estado Brasileño no ha todavía garantizado la total retirada de ocupantes no indígenas del área.

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